Comienza la cuenta atrás para que las islas digan adiós al ticket de residente: Sí, aquel que nos hacía pagar un billete completo si teníamos la mala fortuna de haberlo dejado olvidado en casa.
Ese folio que prácticamente nadie podía conservar más de 6 meses (bien porque se deterioraba o se rompía) tiene los días contados ya que a partir del próximo 1 de noviembre no será necesario dicho certificado (ojo, en papel) para viajar. A partir de ese momento, todos los canales de venta de billetes bonificados estarán incorporados al programa SARA, o lo que es lo mismo; el sistema de acreditación de residencia automatizado.
Cabe indicar que este sistema está en pleno funcionamiento desde el 1 de octubre del año 2013, fecha en la que se abría el nuevo procedimiento a las compañías y los sistemas de reserva para que estos pudieran integrarse y ofrecer a sus usuarios (con fecha de noviembre de 2014) la posibilidad de que la verificación se realice de manera automática.
La implementación del SARA se ha realizado de manera progresiva ya que es amplia la complejidad tecnológica del proceso. De ahí que, mientras se procedía a dichas actuaciones, el Ministerio de Fomento tuviera que recuperar el certificado de residencia en formato papel como solución transitoria y con miras a seguir velando por los fondos públicos.
Y qué decir de la reforma del decreto sobre la insularidad: Pues bien, todo apuntaría a que dicha reforma regulará los descuentos a los residentes no peninsulares al tiempo que contemplará la obligatoriedad para todas las aerolíneas, navieras y agencias de viajes de incorporar el sistema telemático SARA.
Con la nueva reforma, según apuntan fuentes ministeriales, se habilitará -de nuevo- la presentación del DNI como requisito para obtener el descuento y se autorizará también el uso del pasaporte; una opción que hasta ahora no era válida para acreditar la residencia y tener derecho a la bonificación.
Fuente: ibeconomia.com