LA NEGOCIACIÓN COLECTIVA EMPIEZA A CAMBIAR / Las retribuciones suben más que la tasa anual del 0,5% de los precios en enero.
La subida salarial media pactada en los convenios colectivos registrados y con efectos económicos en enero fue del 1,49%. El incremento es seis centésimas más de como terminó el año pasado, por encima del 1,43% de los dos últimos meses de 2017, y la cifra más elevada de los últimos siete años. Sólo en enero de 2011 hubo una subida salarial pactada superior a la de este año, con un aumento del 1,98%, según informó ayer el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
El incremento salarial pactado del 1,49% es casi un punto superior a la tasa de inflación interanual de enero, que fue del 0,5%. El Instituto Nacional de Estadística publicará el dato definitivo el próximo jueves. Por lo tanto, los salarios empiezan el año ganando de media un punto de poder adquisitivo.
Curiosamente, la negociación colectiva alcanza un año más tarde una de las propuestas de la patronal CEOE para 2017, que era un incremento medio del 1,5%, ampliable al 2% con salario variable. Es decir, si así lo permite la productividad en la empresa y el sector.
Precisamente, con estas condiciones, la propuesta oficiosa para este año de la CEOE, sin hacer formal en la mesa de negociación, es un incremento máximo del 3%. De esta cifra, un punto correspondería, en su caso, a la productividad en forma de salario variable. Es decir, que es un incremento que está sujeto al cumplimiento de los objetivos de facturación y, por tanto, no es consolidable para siempre.
En todo caso, la subida de los salarios se debe a varias razones: la primera es el crecimiento de la actividad que, según el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha comenzado el año creciendo en torno al 3%, después de haber cerrado 2017 con un incremento del 3,1%.
AÑOS ANTERIORES
En segundo lugar, entre los convenios registrados en enero, las condiciones económicas de la gran mayoría fueron pactados en años anteriores y una parte de sus efectos económicos se han puesto en marcha en enero, con la revisión salarial.
Este buen momento de la actividad permite aumentar los beneficios a las empresas y crear empleo, lo que también favorece abrir un poco la política salarial. De alguna manera, hay un cierto consenso en los agentes económicos, incluido el Gobierno, en que tras una durísima crisis económica, ha llegado el momento de pedir a las empresas que abran un poco la mano, para mejorar las condiciones de los trabajadores.
Así, la subida salarial media pactada en los convenios de empresa en enero fue del 1,21% en enero, por encima del 1,14% de diciembre de 2017. El incremento medio de las retribuciones en los convenios sectoriales fue del 1,51%, frente al 1,45% de noviembre y diciembre del año pasado. En este contexto, Empleo recalcó que el 40% de los trabajadores cubiertos por los 1.672 convenios con efectos económicos en enero, tienen subidas salariales superiores al 1,5%. El 43,07% pactaron subidas de entre el 1% y el 1,5%, y el 20,9%, acordaron una subida de los salarios por debajo del 1%.
Incluso, la mejora de la situación económica y de la disposición de las empresas a subir salarios se nota en que la negociación colectiva está fluyendo más que en años anteriores. Eso, a pesar de que las patronales CEOE y Cepyme y los sindicatos CCOO y UGT apenas han empezado la negociación del acuerdo interconfederal para la negociación de este año.
Así, el pasado 31 de enero se habían registrado, incluidas revisiones salariales pactadas en años anteriores, 1.672 convenios colectivos, lo que supone un incremento del 25,2% respecto al mismo mes del año pasado. Por lo tanto, los trabajadores cubiertos ya son más de 3,6 millones de trabajadores, lo que significa un aumento del 15%.
La fluidez de los convenios está bajando la conflictividad laboral. Según informó ayer la patronal CEOE, en enero hubo 58 huelgas, que fueron secundadas por 6.522 trabajadores, con la pérdida de 429.872 horas de trabajo.
Respecto al mismo mes de 2017, el número de huelgas descendió un 20,55%; las horas de trabajo perdidas en las empresas disminuyeron un 0,93%, y el número de trabajadores que participaron en las mismas bajaron un 36,43%.
Fuente: Expansión