La Seguridad Social comenzará a publicar el próximo año la lista de empresas y autónomos morosos en el pago de sus deudas por cotizaciones sociales. Se trata de seguir el ejemplo de la Agencia Tributaria, según anunció ayer el
secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, tras intervenir en el Consejo Económico y Social.
En un acto organizado por CCOO sobre la Seguridad Social, Granado reconoció que la decisión del Gobierno “enfadará a las empresas, pero es inevitable”, porque la intención del Gobierno es aumentar la recaudación para reducir el déficit del sistema y poder abonar las pensiones.
No obstante, Granado añadió que la Seguridad Social seguirá el procedimiento de la Agencia Tributaria, porque “es el más respetuoso”. Es decir, el Gobierno avisará a los empresarios deudores con anterioridad para que puedan regularizar su situación antes de salir en las lisas de morosos.
Hay que tener en cuenta que la lista de empresas morosas será también una fuente de información para los trabajadores de las mismas. La mayoría da por hecho que su empleador cotiza por él, o ella, a la Seguridad Social, porque aparece en la nómina, pero pocos suelen comprobar si eso está sucediendo realmente, a no ser que pidan información a la administración por su vida laboral.
El director general de la Tesorería General de la Seguridad Social, Javier Aibar, matizó que para publicar las listas de empresas morosas, el Ministerio de Trabajo debe modificar primero la Ley General de la Seguridad Social. Las norma no permite hacerlo actualmente.
Por lo tanto, la entrada en vigor de la polémica relación de empresas morosas dependerá de los trámites parlamentarios para la modificación de la Ley General de la Seguridad Social. También hay que tener en cuenta que el Gobierno de Sánchez no cuenta con mayoría en el Congreso de los Diputados y, como todas la medidas, deberá negociarla con la oposición.
Los autónomos
En todo caso, Aibar aseguró que esta medida afectará también al autónomo, tenga o no trabajadores a su cargo. Sea considerado él mismo como la unidad económica o tenga asalariados en una pequeña sociedad. Por el contrario, en la lista de morosos no aparecerán las empresas que hayan acordado con la Seguridad Social el aplazamiento del pago de la deuda.
Hacienda empezó a publicar su lista de morosos en diciembre de 2015 y, desde entonces, se publica todos los años en junio. En ella figuran las empresas que tenían deudas o sanciones tributarias de más de un millón de euros al final del año anterior. Bien es verdad que el Gobierno ya ha anunciado su intención de rebajar de un millón de euros a 600.000 euros el umbral de deuda a partir del cual se aparece en la lista de morosos con la Hacienda Pública.
En todo caso, Granado abogó porque las empresas, incluyendo las administraciones, paguen más a la Seguridad Social y pidió un aumento de los salarios para elevar la cotización a la Seguridad social. Como dato, señaló que, desde 2012, las aportaciones de los empresarios al sistema de protección “han caído en 10.000 millones de euros”. Un problema que, en su opinión, se debe “al desastre” causado por la reforma laboral que promulgó el Gobierno anterior y que entró en vigor en febrero de ese año. En su opinión, junto a la crisis económica, contribuyó a deprimir los salarios y, por lo tanto, a bajar la aportación de los empresarios y de los trabajadores a la Seguridad Social.
Por todas estas razones, Granado dijo que “lo más importante, lo más urgente es restaurar la cotización de los empresarios y de las administraciones para elevar su financiación de la Seguridad Social”. Por esta razón, defendió la supresión “de las reducciones y bonificaciones de cotizaciones sociales inadecuadas, y otro tipo de medidas [para los empresarios] que han hecho posible que disminuya la recaudación Seguridad Social”.
Salarios de la crisis
A continuación, Granado abogó por la subida de los salarios, y se mostró concluyente: “Nadie puede comprender que los salarios actuales, equivalentes a los que se pagaron durante la crisis, puedan pagar las pensiones”. Abundando en este argumento, Granado recalcó que la media de las nuevas pensiones de jubilación, que se dan de alta en el sistema es un 45% superior a la media de los nuevos salarios. Las nuevas pensiones tienen una media de 1.305 euros mensuales, mientras las media de las nuevas altas de cotización, por la entrada de trabajadores, apenas rondan los 900 euros en algunas provincias. “Es imposible pagar buenas pensiones con malísimas cotizaciones y esto el que no lo entienda, debe de entenderlo”, remachó el secretario de Estado de la Seguridad Social.
Granado anunció también la creación de una agencia de la Seguridad Social que unifique todos los servicios que proporciona. Tanto la recaudación de las cotizaciones sociales como el pago de las pensiones y otras prestaciones. En realidad, éste es un viejo proyecto que intentó poner en marcha el Gobierno de José María Aznar, en 2001, con Juan Carlos Aparicio de secretario de Estado de la Seguridad Social. Sin embargo, nadie lo ha llevado a cabo por la complicación y el coste que tiene la unificación de todos los organismos de la Seguridad Social: la Tesorería, el Instituto Nacional de la Seguridad Social o el Instituto Social de la Marina.
Fuente: Expansion Pro-Orbyt