- El 61% de los empresarios espera aumentar sus ingresos por ventas en 2023, diez puntos porcentuales más que en octubre, en línea con las mejorías de las expectativas económicas para este ejercicio, según el Informe de Índice de Confianza, elaborado por la organización de asesoramiento ejecutivo Vistage.
Aunque la mayoría de los empresarios encuestados, 15 mujeres y 64 hombres de entre 30 y 65 años, se muestra optimista, un 26% de esos 79 directivos sostiene que su facturación para este año se mantendrá igual y sin cambios, mientras que un 11% se aleja de esas previsiones de estabilidad y vaticina una disminución de sus ingresos por ventas en 2023.
Su visión de la economía española para este año se muestra dividida entre el 45% que apunta que irá a peor y un 41% que cree que seguirá más o menos igual. Solo un 12% ve una evolución positiva de la economía del país.
Sin embargo, la percepción de los empresarios ha mejorado de octubre hasta la fecha. Entonces, solo un 18% auguraba una mejora o estabilización del panorama económico; ahora, ha ascendido al 53%, si se suman los que creen que irá a mejor y los que sostiene que seguirá más o menos igual.
Estas respuestas reflejan que los empresarios dejan atrás un 2022 que para el 57% fue peor que el año anterior, y solo para un 43% mejoró o, al menos, se mantuvo estable.
Los 79 directivos encuestados para este Índice de Visage coincidieron en que descartan los recortes en inversión para este 2023 y, de hecho, la mitad se plantea aumentarla. Los empresarios españoles tampoco incluyen en sus planes para este año recortes en inversión fija.
Además, este informe refleja que el 55% de los miembros de Vistage opina que la rentabilidad de sus empresas mejorará, un 26% de los encuestados considera que este indicador permanecerá igual, y un 16% pronostica un empeoramiento de esta variable.
El 54% de los directivos españoles asegura que aumentará la plantilla en 2023. A pesar de que supone más de la mitad de los encuestados, se observa un recorte de dos puntos porcentuales respecto a las respuestas de octubre, cuando el 56% planeaba contratar.
A pesar de ese retroceso en la contratación, los planes de recortes de plantilla mejoraron entre octubre y diciembre. En octubre, el 18% de los empresarios contemplaba despidos frente al 7% que admitió tener previsto un recorte de trabajadores en diciembre.
Por su parte, el 38% de las empresas continuarán con el mismo número de empleados.
Los directivos que buscan aumentar sus plantillas señalan que el principal problema que encuentran es la escasez de talento. El 63% indica que los problemas de contratación afectan a su productividad, mientras que un 37% asegura que esto no ocurre en sus empresas.
Ante las dificultades para fichar talento, las empresas encuestas han recurrido en los últimos meses a la implantación de la flexibilidad horaria, el trabajo a distancia, el desarrollo del talento existente y, en menor medida, las subidas salariales. Además, un 12% confirma que ofrecer buenas condiciones salariales a sus trabajadores facilita la atracción de candidatos.
La retención de talento resulta a las empresas más sencilla que su captación, y solo un 18% de los directivos reconoce sufrir fuga de empleados. Este dato se ha moderado desde octubre, cuando ascendía al 56%.
En lo que se refiere a las salidas de las compañías, el 51% de los empresarios dice que fueron voluntarias y un 28%, despidos.
Respecto al modelo laboral actual, aunque las empresas están apostando por el teletrabajo para atraer el talento, la modalidad preferida por los directivos españoles es el modelo híbrido, que conjuga la presencialidad con el trabajo a distancia.
No obstante, se aprecian distintas tendencias en función del tamaño de la empresa. Las más pequeñas apuestan por un incremento del teletrabajo, mientras que las medianas optan más por el híbrido. La aceptación del trabajo a distancia en las grandes empresas es todavía residual, según las conclusiones de Vistage.
Los tres problemas que identifican las empresas en 2023 son la inflación, los ciberataques y la logística.
El 72% de las compañías encarecerá sus productos o servicios este año, un 21% mantendrá igual sus precios y un 6% los rebajará.
Los empresarios aseguran que la inflación fue uno de los grandes contratiempos de 2022, que provocó sobrecostes relacionados con los proveedores para el 25% de los encuestados y con la energía para el 20%. El IPC también llevó a un 18% de los encuestados a subir los salarios de sus empleados.
En cuanto a los ataques informáticos y el robo de datos, el 11% afirma haberlos sufrido. Para responder a este tipo de delitos, el 65% de los ejecutivos cuenta con una estrategia al respecto, frente al 25% que carece de ella.
Respecto a las cadenas de suministros, el 28% de los encuestados manifiesta no sufrir ninguna contrariedad, frente al 20% que asegura tener problemas logísticos. Para un 30%, la cadena de suministros ha mejorado.
Fuente: EuropaPress