Un millón ochocientos mil españoles pasan muy a su pesar los lunes al sol. Como los protagonistas de la popular película de Fernando León, del mismo título, ven cómo sus días transcurren entre la desesperación y la angustia. Sin empleo y sin la esperanza de encontrarlo, después de haber escuchado en demasiadas ocasiones un no por respuesta.
“Ya te llamaremos…, lo sentimos pero eres demasiado mayor, el problema es tu edad…” son algunas de las excusas que reciben los mayores de 45 años. Un colectivo «especialmente vulnerable» al desempleo de larga duración, ya que uno de cada dos parados se encuentra en esa franja de edad, según un informe del Consejo Económico y Social (CES).
Los grandes olvidados del drama del paro en España se sienten “invisibles”, pero quieren hacer oír su voz porque todavía, aseguran, «tienen mucho que aportar». Un 53% de los desempleados mayores de 45 años llevan más de dos años en el paro y el 70% cuenta con una educación básica, lo que hace todavía más difícil su reinserción en el mercado laboral.
La construcción y la industria
La mayoría procede del sector de la construcción y de la industria, pero poco a poco se están incorporando a este grupo de parados muchas mujeres de los sectores tradicionales, sostiene el informe del CES, que señala que este drama se está viendo “ensordecido” por otro gran problema: el desempleo juvenil.
Pese a las dificultades y a las puertas que se les cerraban, algunos de estos parados han conseguido abrir pequeños huecos de esperanza. Es el caso de Rosa Peris, vicepresidenta de Encuentra empleo mayores de 50 años. Esta Licenciada en Bellas Artes vio cómo su vida se desmoronaba cuando se divorció y se quedó sin trabajo. Pasaba de los 50 años y encontrar un empleo se convirtió en una tarea ardua. Su hija le ayudó en la búsqueda y logró lo que parecía imposible. Entonces pensó que si lo había hecho con ella, podía ayudar a otros desempleados en su misma situación. Y ambas crearon una asociación que facilita a los parados mayores de 50 la búsqueda de empleo, al ofrecerles todas las ofertas que hay en el mercado teniendo en cuenta su perfil. “Tratamos de llevar esperanza a los parados e intentamos hacer ver a las empresas que la gente senior todavía tiene mucho que aportar”, explica Peris, que añade que poco a poco “algunas empresas están tomando conciencia y dejando de discriminar por motivos de edad”.
Sigue habiendo discriminación», matiza Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco, «pero es cierto que las empresas se están dando cuenta de que hay que eliminar estas barreras porque un 41% de los desempleados en España tienen más de 45 años y no se puede desaprovechar ese talento”.
‘Riesgo de pobreza’
El pasado mes de septiembre, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) instó a España a ayudar más a los parados de larga duración y, en especial, al colectivo de mayores de 45 años que han agotado todas las prestaciones para “atenuar el riesgo de pobreza”. La situación es especialmente dramática para los parados con cargas familiares que no tienen prestación o a los que se les está agotando.
Para tratar de mejorar su dramático día a día, el CES propone que este colectivo “participe en todos los programas de empleo en proporción a su dimensión; también que se rebaje el requisito de edad para acceder al subsidio especial para mayores de 55 años que el Gobierno elevó, y que se reconsidere el diseño de Renta Activa de Inserción para elevar su duración o suprimir el número de veces que puede percibirse”. Sin embargo, para Mesonero “los subsidios no son la solución. Es necesario poner el foco en las políticas activas de empleo”, explica, y “dar formación a los parados para que se reciclen profesionalmente”.
Fuente: El Mundo